
La japonesa Marie Kondo es un éxito mundial. Ha escrito libros que se venden de a millones, es autora de una novela ilustrada, tiene una firma de cajas organizadoras y hasta dispone de su propio Reality Show.
El Método KonMari es una técnica creada por ella misma que se basa -de manera simplificada- en colocar prendas y objetos personales en el suelo y descartar todo aquello que no genere “felicidad”.
En Netflix ya se puede disfrutar de la serie ¡A ordenar con Marie Kondo! donde la japonesa, capítulo a capítulo, pone en práctica su método mediante la visita como Especialista del Orden a diferentes familias de Los Ángeles que abren las puertas de sus hogares con la esperanza de recibir la ayuda de Marie, quien, una vez interioriza y comprende las conductas y las posesiones de los miembros de la familia, entra en acción. Según ella misma dice: “mi misión es hacer felices a las personas ordenando por todo el mundo”.
Para ayudarte a entender su técnica te compartimos algunas lecciones que se pueden ver en la serie y que puedes probar a implementar en tu casa y, si no las has visto aún, ¡te recomendamos que no te la pierdas!, te va a encantar y sobre todo ¡va a cambiar para siempre la manera de entender y vivir tu hogar!
1. El orden para ordenar
Marie Kondo sigue un perfecto orden para ordenar, valga la redundancia. Para empezar a ordenar debemos colocar los objetos por categoría y no por ubicación. Los grandes bloques que utiliza son: ropa, libros, papeles, Komono -una amplia categoría que incluye la cocina, el baño, el garaje y un popurri de cosas inclasificables- y, por último, objetos de valor sentimental.
Según la especialista, si no agrupamos todas las cosas pertenecientes a una categoría en un mismo lugar -por ejemplo, la ropa-, y lo hacemos en diferentes estancias o muebles de la casa, no somos conscientes de la cantidad real de cosas que tenemos. La idea es que ‘de un vistazo’ veamos la magnitud de nuestras pertenencias y esto nos ayude a decidir qué se queda y qué se va.
2. Doblado vertical
“Todo lo que se mantiene de pie se puede doblar en vertical”. Esto es lo primero que dijo Marie Kondo sobre su técnica. El doblado consiste en conseguir un rectángulo con la prenda y hacer los pliegues necesarios según la altura del cajón o caja dónde lo vamos a guardar. El doblado vertical que ella propone permite optimizar al máximo el espacio y poder ver rápidamente lo que buscamos -incluso lo que no sabíamos que teníamos-. Facilita por tanto el ‘encontrar algo’, el ‘pillarlo’ y el ‘guardarlo’ de nuevo y, además, transmite sensación de orden, belleza y armonía.
3. Un lugar para cada cosa
Que cada cosa tenga su lugar asignado es otra de las reglas básicas del orden y de su mantenimiento. Para ello, Kondo recomienda buscar un lugar concreto para cada una de nuestras pertenencias y así evitar ir dejándolas por cualquier rincón de casa.
4. ¿Y en la cocina?
La cocina es una tarea difícil. Marie Kondo insiste en que es complicado tenerla siempre limpia, porque es un espacio que se utiliza varias veces al día. Sin embargo, la gurú del orden plantea algunos tips para tener todo más organizado también en esta parte de la casa.
Por ejemplo, propone colocar los tuppers de manera que -al igual que con la ropa- al abrir el cajón se vean todos a la vez, con su tapa incorporada. Con otros objetos, como los utensilios para cocinar, la japonesa recomienda juntarlos en función de su tamaño, y utilizar cajas para ordenarlos.
5. La felicidad y el descarte
Con su primer libro “La magia del orden” Kondo le demostró al mundo por qué su misión es organizar para desarrollar una sociedad que, a través de poner orden en sus hogares, vivan cada día rodeados de las cosas que de verdad les gusta y les hagan felices.
Al haber aprendido a categorizar, agrupar, ordenar y, sobre todo, decidir qué es lo que te quedas porque te gusta, te hace feliz y te transmite alegría, empiezas a darte cuenta de que hay otras un montón de cosas a tu alrededor que tampoco te gustan tanto y mucho menos te hacen feliz. Por eso, la fórmula que propone es:
Orden Físico + Orden Mental = Equilibrio